¿En qué consiste la infiltración epidural?:
Consiste en la introducción de anestesias locales y un c en el espacio epidural a través de una punción. En función de la localización de la lesión se puede realizar desde la región cervical hasta la lumbar, siendo esta última la más habitual. Se realiza siempre bajo prueba de imagen, nunca a ciegas.
¿Cuándo está indicado?:
Es una opción terapéutica útil en las siguientes patologías:
- -Hernias discales
- -Protusiones discales
- -Estenosis del canal
- -Radiculopatías
- -Cirugia fallida de espalda
- -Lumbalgia con y sin radiculopatía
¿Puedo tener complicaciones?:
A pesar de ser un procedimiento mínimamente invasivo y en régimen ambulatorio, no está exenta de posibles complicaciones, entre las que se encuentra:
- -Hematoma epidural
- -Punción vascular
- -Punción dural
La debilidad en las extremidades tras la realización de la técnica no se considera un complicación, es algo habitual por la utilización de anestésicos locales, pudiendo llegar a perdurar hasta dos horas, por eso se recomienda acudir siempre acompañado para realizar esta técnica.