¿En qué consiste?:
El bloqueo nervioso alivia el dolor interrumpiendo una señal dolorosa mediante la administración de anestésicos locales. El propósito de dicha técnica puede ser diagnóstica o terapéutica. En caso de realizar dicha técnica con un propósito diagnóstico, puede después verse complementado con una técnica más duradera, como puede ser la radiofrecuencia.
¿Cuándo está indicado?:
Las indicaciones básicamente son tres:
- -Bloqueo diagnóstico: nos sirve para identificar el origen anatómico del dolor, muy útil para el diagnóstico diferencial.
- -Bloqueos pronósticos: ayudan a predecir el efecto de una intervención neuroquirúrgica o un bloqueo neurolítico. Se facilita así la decisión del paciente.
- -Bloqueos terapéuticos: se pueden realizar bloqueos temporales con anestésicos locales o bloqueos prolongados con agentes neurolíticos. Con los bloqueos temporales se puede conseguir alivio completo del dolor por un periodo de tiempo limitado. Con los neurolíticos el objetivo es destruir la fibra nerviosa y producir así un bloqueo prolongado y a la vez permanente similar al que se produciría con una sección quirúrgica.
¿Puedo tener complicaciones?:
Las complicaciones son raras y poco frecuentes, entre las más destacadas encontramos los hematomas en el punto de inyección, las infecciones o las neuritis.